Valencia se viste de gala para presentar y vivir la 36ª Edición de la Mostra de València-Cinema del Mediterrani que se celebrará del 15 al 24 de octubre. Este festival acoge películas de 27 países del arco mediterráneo desde Albania a Turquía pasando por Francia, España e Italia, entre otros. Un certamen del celuloide de autor que se suma a los reconocidos como San Sebastián, Cannes, Venecia o Berlín. Una cita con el 7º arte por la que han pasado desde Melina Mercouri, hasta Sofía Loren, Marcello Mastroianni, Alberto Sordi, Vittorio Gassman o la icónica Claudia Cardinale y que este año ha concedido la PALMERA DE HONOR al director francés de “Amélie” Jean-Pierre Jeunet. Hablamos con su director Eduardo Guillot.

¿Qué objetivos pretende este Festival del Cine del Mediterráneo?

Brindar al público valenciano la actualidad del cine contemporáneo que se está produciendo en el ámbito mediterráneo y tener un festival en la ciudad con repercusión internacional, pero, sobre todo, en tiempos de plataformas y difusión en streaming, ofrecerle al espectador contenidos que no son accesibles online y que puede descubrir a través de este festival.

¿Cuáles son los principales beneficios que obtienen los países que concurren?

La difusión de sus obras, tener un eco en medios de comunicación entre el público español y dar a conocer sus trabajos. En ese sentido, somos como cualquier festival de cine.

Más de 25 países del arco mediterráneo participan anualmente en este llamamiento cinematográfico, desde Francia hasta Turquía, ¿Cuál de ellos es más participativo?

La participación no depende de los países, sino de la selección que realizamos cada año entre las películas que consideramos tienen calidad para estar en el Festival. También el caso de los ciclos, como por ejemplo, entre otros, el que dedicamos en 2019 a Italia, con la voluntad de recuperar la edad de oro de la comedia de ese país.

La Mostra, se inició en 1980 y se interrumpió en 2011 debido a la crisis económica mundial. Regresó con usted al frente como director en 2018 tras un paréntesis de 6 años. ¿Qué dificultades principales se encontró y qué novedades o mejoras ha introducido?

El proyecto no vuelve solo conmigo. Somos un equipo en el que está también Rosa Roig, directora técnica y Cecilia Chornet. Yo soy el responsable de la programación. ¿Los retos? En 2018 nos planteamos reiniciar el Festival casi desde cero y retomar sus orígenes. Ello implica dificultades, pero también no cargar con mochilas del pasado.

En esta edición se proyecta un ciclo homenaje al cineasta español Luis García Berlanga. ¿Qué ha supuesto éste para el cine español e internacional?

Es uno de los directores más importantes del cine español. Participó desde sus inicios en este Festival. Es el año del Centenario Berlanga y era la oportunidad de hacer algo diferente. Hemos organizado un ciclo llamado “Esto (no) es una película de Berlanga” porque está integrado no por películas de Berlanga, sino por títulos marcados por su influencia. Entre otras, proyectamos Alla mia cara mamma nel giorno del suo compleanno, una película italiana de los años 70 basada en un guión de Berlanga y Azcona que nunca llegó a rodarse en España  por problemas con la censura.

Italia, desde el principio, ha sido una de las activas participantes en estas ediciones del Festival de Cine del Mediterráneo. De hecho, en su 34 edición (2019), la Mostra dedicó un ciclo a la comedia Italia de la edad de oro con cineastas de la talla de Monicelli, Risi, Comencini, Vittorio de Sica,Fellini, Pasolini o Marco Ferreri. ¿Qué participación tiene este año?

Poca, y es curioso, porque el año pasado Italia ganó la Palmera de Oro con la película italiana “Favolacce”, pero en 2021 no tiene presencia en la competición. Tenemos, dentro del ciclo Berlanga, la película italiana que citaba antes y una coproducción italiana titulada “512 hours”, un documental sobre Marina Abramovic que forma parte de las sesiones especiales y está dirigido por las italianas Adina Istrate y Gia La Salvia, que visitarán el festival para presentarlo.

En esta edición el Festival dedica un ciclo a los “Espectro árabes” para dar a conocer películasde países procedentes de la ribera del Sur del Mediterráneo (Egipto, Marruecos o Túnez). ¿Qué perspectivas ofrece este género dentro del certamen?

Desde nuestra vuelta nos parece importante tener en cuenta la ribera sur del Mediterráneo, y desde entonces le dedicamos un ciclo al cine árabe. En este caso, a películas recientes de género fantástico y de terror que en su mayoría son inéditas en España.

¿Cuántas películas en total se proyectarán en estos 10 días intensos de cine?

En torno a 80/90 distribuidas entre los cines Babel y la Filmoteca.

¿Qué espera de esta 36ª edición?

Que se mantengan las medidas sanitarias que permiten el 100% de aforo y que el público se interese por laprogramación  que le hemos preparado, acuda y le guste.